PRIMEROS PASOS EN EL FRUGALISMO
EL PRESUPUESTO PERSONAL
El presupuesto personal es en realidad un verdadero plan
financiero donde se cuantifican los ingresos y gastos estimados
que tendrás en un periodo determinado (por lo general es un mes). El objetivo
es conocer en qué gastas tu dinero y aprender a administrarlo mejor, para así
ahorrar y alcanzar objetivos a corto, medio y largo plazo. Hacer un presupuesto
también te ayudará a controlar tus gastos, y a reducir el estrés en tu día a
día, al menos en lo que a finanzas se refiere. Para conseguir ser eficaces aplicando el frugalismo en nuestra vida, es
necesario tener una visión clara de cuáles son nuestros hábitos de consumo y
nuestra capacidad de ahorro.
Para realizarlo, anotaremos los ingresos mensuales / anuales esperados, y a continuación recolectaremos facturas, tiques de compras y notas de gastos. Clasificaremos y agruparemos nuestros gastos en función de categorías más o menos simples utilizando para ello papel y lápiz o aplicaciones como las que apunto a continuación
https://www.adicae.net/simulador-presupuesto-familiar.htm
Inicialmente, si decidimos hacerlo manualmente, nos puede servir la siguiente lista de grupos de gastos:
1) Alimentación y bebidas
2) Facturas de suministros en domicilio:
a) Electricidad
b) Gas
c) Agua y basuras
d) Teléfono e internet
3) Vivienda:
a) Impuesto de bienes inmuebles
b) Cuotas de hipotecas o alquiler
c) Comunidad de propietarios
d) Seguro de la vivienda
e) Recibos de sistema de alarma
f) Asistente para limpieza de la casa
g) Reparaciones
4) Transporte
a) Impuesto de circulación
b) Seguros de coches y moto
c) Combustible
d) ITV
e) Revisión anual
f) Mantenimiento y reparaciones
g) Tarjetas de transporte urbano
5) Ropa y calzado
6) Salud e higiene
a) Medicamentos
b) Dentista
c) Complementos y suplementos
d) Productos de limpieza
e) Jabones, geles y pasta de dientes, papel higiénico
f) Cosméticos, cremas y perfumes
g) Peluquería
h) Otros; consultas médicas, fisioterapeuta, etc.
7) Ocio
a) Viajes de vacaciones y estancias hoteles
b) Comidas en restaurantes
c) Consumiciones en bares
d) Suscripción a canales de TV
e) Gimnasios
f) Clases dirigidas (pilates, etc.)
g) Periódicos, revistas y libros
8) Otros gastos
a) Regalos
b) ONGs
c) Veterinario
d) Comida perro
e) Seguro de decesos
f) Seguros sanitarios
Tampoco es necesario crear de inicio una lista ideal. Cuando ya tienes tu lista no tengas miedo de modificar de vez en cuando, mejorarla, añadir nuevas categorías o eliminar las que no estás usando. Es normal, porque con el tiempo las necesidades de cada uno de nosotros están cambiando.
La diferencia entre los ingresos y gastos, determinara el estado de salud de nuestras finanzas, y nos permitirá avanzar en la puesta en marcha de mejoras aplicando el frugalismo en nuestras vidas.
ESTABLECIENDO METAS REALISTAS
Un principio básico del estilo de vida frugalista es ahorrar gran parte de los ingresos. Si es posible, también se realizan inversiones financieras para rentabilizar los ahorros.
Una vez conocido nuestro estado financiero, y las principales partidas de gastos, prepararemos una lista de nuestras metas financieras a corto y largo plazo. Debería tomar entre uno y tres años alcanzar las metas a corto plazo y pueden incluir cosas como establecer un fondo para emergencias, pagar deudas, comprar un coche o amortizar parciamente una hipoteca. En cuanto a las metas a largo plazo, como ahorrar para la jubilación o para la educación de un hijo, podría tomarte décadas alcanzarlas.
Recuerda, tus metas no tienen por qué ser definitivas, pero identificarlas puede servirte de motivación para mantenerte dentro de su presupuesto. Por ejemplo, tal vez sea más fácil reducir los gastos si sabes que está ahorrando para unas vacaciones.
AJUSTANDO LOS GASTOS
Una vez tienes una visión clara de lo que ganas y gastas, podrás empezar a tomar decisiones en cuanto a tus gastos. Las personas frugales, tienen bien claro la diferencia entre lo que quieren y lo que necesitan. Enfocarte en lo que necesitas y postergar algunas cosas que deseas, es esencial para poder aumentar tu capacidad de ahorro. A veces no significa dejar de hacer las cosas que ya estás haciendo, pero sí de hacerlas de manera diferente.
Por ejemplo: puedes
· llevarte un tupper con comida al trabajo en vez de ir al restaurante a comer porque es más cómodo
· no frecuentar bares y cafeterías
· en vez de comprarte las últimas zapatillas que acaban de salir al mercado, comprarte unas igualmente útiles y con estilo sin gastarte tanta cantidad de dinero,
· en vez de ir al supermercado con los precios más caros a comprar porque está más cerca, caminar dos minutos más al supermercado más barato,
· el invitar a tus amigos a casa, merendar y pasar un buen rato en vez de salir y cenar fuera.
· comparar precios de un mismo producto para obtenerlo más barato y estar atento a las oportunidades que se presentan (tanto para reducir gastos como para invertir)
· no endeudarse y cuando lo hagas en casos excepcionales, como el de adquirir una hipoteca, y en ese caso amortÍzala rápidamente.

Otro principio básico en el frugalismo es que las compras espontáneas no son posibles. Para consumir con más cuidado y gastar menos dinero, las personas frugales piensan en las compras a largo plazo. Algunos aplican la regla de los 30 días: si quieres algo después de un mes de reflexión, lo compras.
Pero hay muchas otras medidas de austeridad que juegan un papel en el frugalismo:
- El uso de descuentos y ofertas especiales.
- Revisión periódica de costes fijos, como seguros y suscripciones.
- Planificación precisa de las compras.
- Tomar prestadas herramientas en lugar de comprarlas.
- Abandono de bienes de lujo.
- Renuncia a un coche.
- Etc.
Aplicando estas prácticas, se puede conseguir elevar de forma importante el nivel de ahorro, lo que facilitará el lograr las metas propuestas.
Inténtalo, pronto veras los resultados
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